Santuario de Yebra de Basa en BTT

El pasado miércoles 21 de julio, mi padre y yo estuvimos “yebradebasapedaleando” (Ya el año pasado antes de la pandemia, en febrero, anduvimos hasta el Santuario de Santa Orosia, en la conocida “Ruta de las ermitas”).

 

Alrededor de las nueve menos cuarto de la mañana comenzamos la ruta, desde Yebra de Basa, concretamente a la altura de la Ermita del Augusto, que es desde donde se inician los 11 kms de ascensión por la pista hasta el Santuario de Santa Orosia.

Se ascienden unos 684 m al 6,1%, desde los 820 m del pueblo a los 1550 del Santuario.

Pista sin complicaciones técnicas y su dificultad radica en la prolongada subida, con pocos respiros aunque sin grandes rampones. 

A medida que se gana altura van mejorando las vistas y el frescor mañanero va desapareciendo con el esfuerzo.

Pájaros, cabras, erizones en flor de amarillo radiante nos acompañan hasta la primera parada en el destino.

Tras un breve descanso y avituallamiento seguimos hacia la fuente-abrevadero de San Cocoba y en la bifurcación del camino que por un lado nos llevaría hacia el pico Oturia y por otro inicia el descenso hacia los pueblos abandonados de Sobrepuerto (Cortillas, Cillas, Basarán, Escartín, Bergua, Sasa, Oliván...) tomamos este último, pero pronto paramos y retrocedemos, puesto que no era la previsión alargar mucho más la ruta y lo que es bajada a la ida, es subida a la vuelta.

Tanto la continuación hacia esta zona de Sobrepuerto como la ascensión al pico Oturia quedan para otras oportunidades.

Sí que nos decidimos a subir justo antes de llegar al Santuario, hasta la Punta del Mallo, 1653 m donde hay un repetidor de telefonía. Subida complicada, alrededor de 1 km con el terreno muy pedregoso. Las vistas de Sabiñánigo y entorno y de la Peña Oroel espectaculares.

Para finalizar nos quedaba el descenso, interrumpido solo para acceder al Mirador de la Ermita de San Cornelio.

Buena ruta, sin pérdida alguna, recomendable. Nos salieron unos 35 kms y poco más de 1000 metros de desnivel + acumulado, en unas 3 horas en movimiento para disfrutar, hacer fotos y respirar aire pirenaico.

 

Nos vemos en los caminos