martes, 21 de abril de 2020

Santuario de Nuestra Señora de Magallón en Leciñena



Más de 1 mes de confinamiento por la Covid 19. Empieza a hacer demasiado tiempo de casi todo. Pero al menos, estamos sanos. Espero que todos ustedes también.

Quiero recordar que el pasado 20 de febrero aún pude realizar una buena ruta de unas 5 horas y 106 kms, con unos 1000 m de desnivel positivo, a la ermita de Magallón en Leciñena. Me acompañó ÁngelScott una vez más.




Desde Valdespartera salí hacia el carril bici del Tercer Cinturón para encontrarme en el Barranco de la Muerte con mi compañero de ruta. De ahí seguimos hacia el azud del Ebro, ribera del Gállego y Sta. Isabel y Montañana. Al poco de coger la carretera que va a Peñaflor nos desviamos a la derecha para poco a poco ir ascendiendo y alcanzando parte de El Vedado de Peñaflor. 

Al llegar a Leciñeña nos dirigimos al objetivo del día, la subida por la carretera que sube a la ermita. Unos 2 kms al 5,3% de media.

Desde arriba, a 600 m de altitud, se contempla una buena panorámica del entorno y de los Pirineos.

La historia de la virgen se remonta a 1283 cuando desaparece de su anterior emplazamiento en la ermita de Santa María de Huerta en Magallón, y se aparece al pastor Marcén en un cerro de Leciñena. A pesar de los intentos de los magalloneros la virgen se volvió aparecer en esta localidad monegrina donde se construyó una ermita. Se fue ampliando en los siglos XVI y XVII, y su devoción creció del tal manera que el santuario servía de culto a veintiocho pueblos de las provincias de Zaragoza y Huesca. En el siglo XVIII el santuario llegó a su máximo esplendor y las donaciones de devotos como el duque de Híjar permitieron la ampliación del templo. Durante la guerra de la Independencia un incendio devastó casi por completo del santuario, y en la guerra civil se utilizó como acuartelamiento siendo las consecuencias nefastas. Tras un largo periodo de restauración en la actualidad cuenta con un albergue y el edificio se muestra en excelente estado. Tiene aspecto de hospedería y en algunas partes llega a tener hasta cinco plantas de altura. Junto a la ermita hay un reloj de sol y un pozo de agua construido en 1560 que recogía las aguas de lluvia de los tejados para abastecimiento de moradores y visitantes del Santuario, con un diámetro de 5,80 m y altura de la bóveda de 7,70 m.














De vuelta, hacia Perdiguera y justo antes de llegar a Villamayor, parada para fotografiar la Sabina de Villamayor, Juniperus thurifera. Tiene unos 13 m de altura y 2’37 m de perímetro. Se estima que data de unos 2000 años de antigüedad. 





Ya tan sólo quedaba rematar el final de etapa hasta Zaragoza.

Para los amantes del strava hay diferentes segmentos pero indico dos de la subida a la ermita:
-          Ermita Leciñena: 2,1 km al 5,3%. KOM 4’54”
-          Subida ermita: 0,7 km al 7,3%. KOM 2’10”

Una buena ruta, disfrutando de esos montes y el aire que todavía estaba aparentemente sin contaminar.
Muy recomendable, para cuando se pueda.

Podéis descargar la ruta en el siguiente enlace, clic aquí.

 
Nos veremos en los caminos



miércoles, 1 de abril de 2020

8 películas de MTB

Mientras hacemos rodillo por ejemplo, podemos aprovechar para ver esta selección de películas gratis en streaming desde Red Bull TV.



Os adjunto el enlace, clic aquí.

Un día menos para vernos en los caminos

#Yomequedoencasa #Coronavirus