Tras el cambio de fecha que tuvieron que realizar en 2016 y la suspensión de la prueba en 2017, el pasado 4 de marzo el Club Ciclista Pina de Ebro junto a la Comarca de la Ribera Baja del Ebro, volvieron a organizar la tradicional marcha btt no competitiva en su quinta edición.
En principio el recorrido único de unos 63 kms que incluía un 75% de camino y pista y un 25 de senda y fuera pista, con un desnivel de menos de 700 m, resultó ser de unos 65kms con prácticamente 800 m de desnivel, debido a algunas modificaciones fruto de las lluvias y el barro existente.
Las 175 plazas se agotaron días antes de la prueba. Y a mí me correspondió el dorsal 169.
Durante la semana, con la nieve del miércoles y las lluvias que incluso cayeron durante la noche y a comienzo de la marcha, no hacían presagiar nada bueno. En los primeros kms hubo participantes que dieron la vuelta, y los que seguimos, sin embargo, pudimos terminarla mejor de lo previsto. Eso sí en algunos tramos el terreno húmedo agarraba más de la cuenta las bicis.
Personalmente he de decir que me gustó el recorrido, alternando zonas pisteras para rodar, con zonas de ascensión y con tramos de sendas, y todo a pesar de que en este tipo último de terreno, y más en sus bajadas, es donde aparecen mis fantasmas de la falta de destreza y técnica. Es en las bajadas de estas sendas-trialeras donde pierdo lo que puedo ganar en las subidas. La sobretensión en estas zonas y el esfuerzo de combatir el barro y el terreno húmedo, me hicieron terminar algo acalambrado con un tiempo aproximado de 3 horas y 24 minutos.
En definitiva, aunque harto de las últimas salidas con barro, contento por haber terminado una prueba más recorriendo zonas desconocidas para mí y acumulando experiencias.
Os dejo con una selección de fotos de las que han colgado los organizadores.
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